La gran mayoría de las terrazas de los chiringuitos, ubicadas en Playa Ancha, junto a
Pese a la crisis, los chiringuitos se llenan de turistas y de residentes que desean refrescarse para sobrellevar mejor las altas temperaturas estivales.
Según los restauradores consultados, hay quienes son más optimistas y afirman que están teniendo “una buena temporada”, en cambio otros más escépticos manifiestan su preocupación respeto a septiembre y aseguran que otros veranos fueron mejores.
Los dueños comentan que el 50% de sus clientes son turistas ingleses, alemanes y noruegos y el resto son españoles. Los fines de semana es difícil conseguir mesa sin reserva en los chiringuitos, ya que están al 100%, manteniendo también una ocupación muy alta entre semana. En cuanto al consumo, los chiringuitos de playa consideran que los clientes gastan menos que otros años. No ocurre igual en el nuevo club de playa perteneciente al Hotel Gran Lujo Finca Cortesía, donde el gasto es muy alto, los clientes gastan más que otros años en el hotel. Para Cortesín esta temporada está siendo mejor que la pasada, en la primera quincena de agosto han pasado por el nuevo club de playa 1250 personas, ocupando también las mesas del restaurante.
Las previsiones para septiembre varían en función del tipo de establecimiento, mientras Finca Cortesín hace una previsión muy buena por el alto número de reservas que ya tiene, los chiringuitos prevén que bajará el número de clientes, aunque creen que consumirán más.
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