El público respaldo con su asistencia el Concurso de Monólogo Villa de Casares

Saben aquel que dice, estaban tres amigos,  uno de Albacete, otro de Cádiz y otro de Casares…. Así podía empezar perfectamente uno de los chistes del repertorio de cualquiera de estos tres humoristas que  el pasado sábado se alzaron con los premios del  este  primer certamen

El Primer Concurso de Monólogos de Casares ha sido todo un acierto que avala la apuesta del Ayuntamiento  de Casares por el humor y la cultura con un evento que llenó el Centro Cultural Blas Infante.

La gala estuvo conducida por otra artista "La Pili"  quien con su espectáculo puso el contrapunto musical a tantas carcajadas como se escucharon el sábado.

El albaceteño Antonio Moya arrasó entre el público y ante el jurado, con un humor fresco y desenfadado que conecta con cualquier tipo de público. Y eso que a sus 26 años este ingeniero no se dedica profesionalmente al humor, por lo que el galardón le supo a gloria

Los 1000 euros del primer premio se fueron a Albacete, mientras que los 300 del  segundo se quedaron más cerca, en Cádiz, concretamente  en Villamartín, desde donde llegó Fernando Beral para meterse al público en el bolsillo con su desparpajo gaditano y  sus tablas, fruto de su dedicación profesional en estos últimos 5 años

El que se quedó en casa fue el galardón del público, que fue a parar a manos de Adrian  Pérez Ledesma, un casareño acostumbrado a  lidiar con los chistes y que ha ido construyendo su monólogo a lo largo de los años con situaciones universales que se pueden dar en cualquier bar de cualquier pueblo o de cualquier ciudad y que hacen su humor sencillo y universal. El publico  lo tuvo claro al otorgar su premio  a Adrian,  quien  supo  arrancar las risas de sus vecinos.