El alcalde de Casares, Pepe
Carrasco, la concejal de Educación, Rocío Ruiz, y la de Costa, Antonia Pineda
se reunieron ayer con la delegada provincial
de la Consejería de Educación, Patricia Alba y técnicos del Infraestructuras y Servicios Educativos con el fin de conocer la situación de las propuestas del Ayuntamiento para el aumento de las plazas educativas del municipio.
La reunión que tenía como
objeto continuar insistiendo en la
necesidad de aumentar las instalaciones educativas del municipio transcurrió
en un tono afable aunque careció de soluciones
a corto plazo como esperaban los responsables
municipales.
Sobre la ampliación del Colegio
Blas Infante con la construcción de un edificio anexo, la delegación de la
Consejería de Educación ha informado que esta obra tendría que esperar hasta verano de 2019, lo que achacaron a los
condicionantes de la nueva Ley de Contratación.
Una prolongación en el tiempo,
que los responsables municipales no entienden ya que el Ayuntamiento
viene insistiendo en la necesidad aumentar el número de aulas desde el pasado curso escolar. Y el proyecto de
ejecución para la construcción de un edificio
anexo al centro, redactado por los técnicos municipales, se entregó a la delegación de la Consejería de
Educación el pasado mes de septiembre y cuando
encontraron una actitud más receptiva.
Respecto a la construcción del
colegio de Casares Costa, desde la
delegación de la Junta de Andalucía se ha señalado
que no es un proyecto viable a corto plazo, ya que existen
necesidades prioritarias en la Comunidad Autónoma. No obstante, los
responsables municipales insistieron en
continuar trabajando en el estudio de las parcelas municipales existentes para
buscar la mejor ubicación e iniciar el
procedimiento de cesión de la mismas, aunque sin perspectivas inmediatas.
Desde el Ayuntamiento de Casares se viene reclamando desde hace años la
construcción de un Centro Escolar en Casares Costa, donde actualmente
residen 422 niños de 0 a 12 años, que deben desplazarse a diario a
colegios de poblaciones vecinas y al Colegio Blas Infante de Casares, que se
encuentra actualmente colapsado. Por lo que también se proponía, más a corto
plazo, ampliar el número de aulas del
Colegio Blas Infante con la construcción de un nuevo edificio de dos plantas en la parte
de atrás del centro escolar y así el alumnado pueda recuperar sus espacios
comunes, como el aula de pretecnología, el laboratorio o el salón de
actos que actualmente se usan como clases.
Los responsables municipales lamentan
que los vecinos de Casares deban seguir esperando para conseguir un aumento de
las instalaciones educativas del municipio y han manifestado su intención de seguir
trabajando para que estos proyectos sean realidad lo antes posible.
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